• Sanidad aprende a comunicar para fomentar la donación

    Los alumnos recrean situaciones reales con el fin de encontrar argumentos que permitan establecer una relación de ayuda y apoyo emocional con las familias en momentos difíciles, favoreciendo las actitudes positivas hacia la donación de órganos, pero respetando al máximo su voluntad. Así, se orientará sobre el modo de comunicar la muerte y de plantear la donación.

    Más de veinte alumnos, entre profesionales de Medicina y Enfermería del Hospital de Guadalajara, participan en el curso ‘Comunicación en Situaciones Críticas: influencia en el proceso de donación’, organizado por la Unidad Autonómica de Coordinación de Trasplantes junto a los coordinadores hospitalarios del Hospital Universitario de Guadalajara.

    La coordinadora autonómica de trasplantes, María José Sánchez Carretero, ha destacado durante su intervención que el objetivo del curso es “más que conseguir la donación, informar adecuadamente a la familia de que ese familiar que ha fallecido puede ser donante”, y ha subrayado que “cada vez es más fácil porque estamos más concienciados”, habiendo familiares que proponen la donación antes incluso de que los profesionales la planteen.

    En este sentido, ha recordado que se ha conseguido reducir la lista de pacientes a la espera de un órgano gracias a la concienciación y al aumento en el número de donaciones, ya que en Castilla-La Mancha se ha superado este año la cifra de 40 donaciones por millón de habitantes, situándose el porcentaje de negativas familiares por debajo del 15% frente al 30% de negativas que se producía años atrás.

    Asimismo, ha puesto en valor el papel de los coordinadores de trasplantes de cada centro para ajustar los mecanismos, vigilar el proceso y contribuir a su mejora, y ha valorado el papel de los profesionales de los diferentes servicios que participan en cada donación.

    Finalmente, ha señalado que “no hay nada más bonito que dar vida y regalarla a otros cuando ya has fallecido”, y que “si uno está dispuesto a recibir un órgano si fuera necesario, también debería estar dispuesto a darlo”.

    Por su parte, la coordinadora de trasplantes del Hospital Universitario de Guadalajara, Elena Yáñez, ha expuesto la importancia de formarse en comunicación de malas noticias por parte “cualquier profesional de cualquier especialidad” y ha agradecido la solidaridad de donantes y familiares de órganos.

    Profesionales de la Organización Nacional de Trasplantes se encargan de impartir el curso, que consta de una parte teórica y otra práctica, consistente en ejercicios destinados a desarrollar la habilidad del interlocutor en las entrevistas con las familias de pacientes fallecidos.

    En cuanto a la parte teórica, se abordan aspectos como los sentimientos asociados a la pérdida y la separación, la actitud ante las reacciones de dolor y la respuesta personal frente a la profesional, así como el modo de desarrollar un comportamiento profesional eficaz o el papel de los profesionales ante el proceso de detección de donantes y la solicitud de donación.