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La vigesimoprimera de las pruebas de la IX edición de las Rutas de Senderismo que organiza la Diputación Provincial de Albacete nos lleva hasta la comarca del Campo de Montiel para visitar distintos parajes y senderos que recorren El Bonillo. Una atractiva prueba circular, denominada “Ruta del nacimiento del río Córcoles, jaral y pequeñas navas”, de dificultad baja. Cuenta con 13,1 kilómetros de distancia y unas cuatro horas de duración.
📷 Fotografías: Luis Sánchez Vizcaíno
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Una ruta de 13 kilómetros
Serían recibidos por Antonio Sánchez, técnico de Medio Ambiente, que sería el guía y maestro durante la ruta. Así, y tras tomar café en El Bonillo se desplazaron en autobús por la Carretera de Lezuza hasta llegar al cruce con La Cañada Real de los Serranos, desde donde comenzarían la ruta a pie, alrededor de las 9.30 horas. Con una mañana soleada, aunque no con mucho calor, gracias la ligera brisa que corría.
La ruta transita por una zona muy interesante desde el punto de vista paisajístico y medioambiental. Discurre en parte por la ZEPA de Aves Esteparias de El Bonillo, y también por la Cañada Real de los Serranos y por la zona de Navas y Navajos.
Durante los primeros kilómetros caminaron hacia el norte por “La Vereda”, que es como en El Bonillo se conoce a la Cañada Real. Entre campos de cultivo de cereal de secano y algunas encinas, y rodeados que gran cantidad de flores y entre ellas claro esta las amapolas.
Fueron recorriendo los grandes hábitats del Campo de Montiel: la estepa cerealista donde también cruzaron por pequeños bosques de encinas con algunas sabinas, ya que en El Bonillo se encuentra un entorno natural protegido, los Sabinares del LIC (Red Natura 2000) de las Lagunas de Ruidera. Hay un sabinar que puede considerarse un área de excepcional interés debido a su cantidad de árboles que aquí se encuentran y la edad de los mismos, debido a esto es uno de los más importantes de España. También pueden encontrarse por más espacios, como el que nos ocupa.
Cortijo de ‘El Gramal’
Pasaron también por el cortijo de El Gramal, en cuyas inmediaciones nace el río Córcoles, aunque en esta ocasión sin apenas agua.
Anduvieron entre aerogeneradores hasta llegar a un descansadero de madera, con bancos y sombra, lugar que aprovecharon para almorzar y degustar la rica empanada, que por cotensia del ayuntamiento, pudieron degustar.
Continuaron hacia los molinos que se divisaban en lo alto. A la vez entraron en la primera mancha de encinar, el ecosistema típico de Monte Mediterráneo de la zona. Pasaron por una pequeña nava antes de llegar a una antigua cantera de cantos rodados como son los guijarros, que abundan por esta zona.
Al llegar al primero de los molinos, giraron a la derecha, directamente al sur, siguiendo los molinos, para alcanzar uno de los puntos más singulares del término municipal de El Bonillo, un jaral de Jara pringosa (Cistus ladanifer). Interesante formación vegetal que ofrece un espectáculo de flores incomparable entre mayo y junio.
Flamencos
Llegaron a los últimos aerogeneradores, donde encontraron otras dos pequeñas navas, formadas por la acumulación de agua de lluvia, lugar donde también pudieron ver unos cuantos flamencos. Continuaron dirección sur, pasando por manchas de monte y por campos de cultivo con encinas, sabinas, quejigos, plantas aromáticas y gran cantidad de pequeñas florecillas que tapizaban el suelo por donde pasaban.
Antes de llegar de nuevo a la Cañada Real, pasaron por nueva nava, la más grande, el Navajo Guijoso. Dependiendo de la época del año, y si tiene agua, se tupe en la superficie de blanco con Ranúnculos acuáticos, como así era, al igual que en algunas de las que pasaron anteriormente. Desde aquí solo les restaba, tras una pequeña subida coger de nuevo la Cañada Real y regresar al punto de partida.
Final con pintura del Greco
Tras la merecida comida, hicieron un recorrido histórico-cultural guiado por el casco antiguo de El Bonillo, visitaron el Museo Parroquial (con importantes cuadros, entre ellos un magnífico Greco), la Iglesia de Santa Catalina, el conjunto histórico de la Plaza Mayor, y para finalizar visitaron las instalaciones del Campo Municipal de Golf “La Lagunilla” donde pudieron comprobar sus habilidades en una clase de iniciación de este apasionante deporte.
