Institutos como el Ramón y Cajal de Albacete han tenido aulas a más de 32 grados y alumnos con mareos. Con estas temperaturas, anómalas para el final de la primavera, ni se debe practicar ejercicio físico ni salir al patio si no hay sombra. Para colmo, esta circunstancia, de un calor inusual, se da cuando los institutos van a acabar las clases un 28 de junio. El Gobierno regional ha autorizado hoy a los equipos directivos de los centros educativos de Castilla-La Mancha a que tomen las medidas que consideren más oportunas en relación con la jornada escolar y las actividades a desarrollar si las temperaturas superan los 30 grados.
La Consejería de Educación Cultura y Deportes de Castilla-La Mancha ha enviado hoy unas instrucciones a los centros educativos a la vista de las previsiones meteorológicas, y con el fin de garantizar, en la medida de lo posible, el bienestar del alumnado, del profesorado y del personal no docente.
Según detallan las instrucciones, las medidas que se tomen serán comunicadas a los representantes de la comunidad educativa en el consejo escolar y la Dirección Provincial.
Se garantizará, en todo caso, la atención al alumnado durante la jornada lectiva, organizando actividades de grupo en espacios más confortables para alumnos y personal docente y no docente, y asegurando los servicios de comedor y transporte escolar.
En los casos en que sea necesario tomar medidas excepcionales que alteren la actividad lectiva, se tendrá garantizada la realización de pruebas finales y de recuperación, que procurarán programarse a primeras horas en que la temperatura de las instalaciones sea más baja.
En los días que restan hasta la finalización del curso, y en el caso de que los centros tomen medidas que alteren el horario lectivo, si han finalizado sus exámenes y recuperaciones, las familias podrán solicitar al centro la no asistencia a clase justificada por razones de que en su domicilio puedan permanecer en mejores condiciones de seguridad.
Si los alumnos se encuentran en el centro y los padres o familias autorizadas deciden recogerles antes de la finalización de la jornada, lo harán previa comunicación a la jefatura de estudios o tutor correspondiente.
Ante cualquier duda, y teniendo en cuenta que debe primar la seguridad del alumnado y personal docente y no docente, las direcciones provinciales también están autorizadas para tomar otras medidas excepcionales que consideren necesarias.
En todo caso las direcciones de los centros tendrán en cuenta todas aquellas recomendaciones generales que en estos supuestos están siendo difundidas sobre no exposición al sol, e hidratación, dadas por los servicios de protección civil, autoridades sanitarias y locales en cada caso.
Podrá flexibilizarse el horario del personal no docente que no tenga relación directa de atención al alumnado (limpieza, mantenimiento…) de manera que pueda realizar su trabajo a horas donde la temperatura ambiente de las instalaciones permita trabajar en condiciones de mayor eficacia y seguridad para los trabajadores.
En cuanto a los que tengan relación directa de atención con el alumnado, se podrán establecer turnos de descanso y relevos a los largo de la jornada laboral que contribuyan a un desarrollo de su trabajo de manera más eficaz y segura.