
El incremento anormal de las patologías del aparato respiratorio se ha reflejado en un aumento de la venta de antitusivos. Y es que, según informa la Federación Empresarial de Farmacéuticos Españoles (FEFE), el año 2022 ha marcado un antes y un después en las farmacias. Se ha recuperado, aunque parcialmente, el consumo de antibióticos; ha crecido el de las vacunas y el de los medicamentos para el aparato respiratorio.
Aunque la venta de antitusivos se haya disparado, las cifras las siguen liderando analgésicos, antiagregantes plaquetarios y tranquilizantes.
Nolotil, Paracetamol y Adiro 100, los fármacos más vendidos
Por millones de unidades vendidas, nolotil, paracetamol y adiro 100 fueron los fármacos más vendidos el año pasado. Sin embargo, el mayor gasto se lo llevaron un anticoagulante, Eliquis, y un antidiabético, Ozemplic.
El consumo de tranquilizantes se normaliza
Hay que destacar que se normaliza el consumo de tranquilizantes, que habían aumentado mucho durante la pandemia, y que otros grupos terapéuticos como los medicamentos anti acné o para patologías de los órganos de los sentidos retroceden, quizá porque se hayan mantenido hábitos de alejamiento social.
Algunos medicamentos, como los empleados para la supresión tabáquica, caen fuertemente debido a la escasa eficacia de los disponibles en 2022, aunque esta situación puede cambiar con la introducción de otros más eficaces y seguros en el presente año.
La contradicción de las vacunas
El caso analizado sobre las vacunas es paradigmático: las vacunas que se encuentran disponibles en las farmacias, por no ser financiadas o no incluirse en campañas de vacunación oficiales, crecen fuertemente; mientras que las vacunas como gripe o neumococo caen por su falta de disponibilidad, sin que mejoren las tasas de vacunación de las campañas oficiales, algo que venimos poniendo de manifiesto desde FEFE y que tendría que hacer reflexionar a los responsables de salud pública.