• Las donaciones de órganos apuntan a un nuevo récord

    Castilla-La Mancha ha pasado de 1,2 donantes de órganos por millón de habitantes en 1990 a 40,2 en 2016. A nivel nacional, 2017 apunta a un nuevo récord histórico en esta parcela al que no será ajeno la región. La predicción, basada en un incremento que en marzo ya supera el 10%, es del presidente de la Organización Nacional de Trasplantes (ONT), Rafael Matesanz, en la XIV Reunión Nacional de Coordinadores de Trasplantes y Profesionales de la Comunicación, que se celebra en Zaragoza.

    Aquí se ha puesto de manifiesto la solidez del sistema de trasplantes y donación de órganos en España; las amenazas, como el turismo sanitario, y la generosidad cada vez mayor de los españoles. Y es que, de los más de 60.000 enfermos renales que se tratan en España, más de la mitad, 32.400, son trasplantados y liberados, por tanto, de la diálisis, de vivir dependientes de conectarse a una máquina.

    El año pasado, España superó el bache de la crisis y registró un récord histórico en donaciones de órganos que se vio reflejado en comunidades autónomas como Castilla-La Mancha, donde una de sus provincias, Albacete, experimentó un incremento de las donaciones del 70%. Asimismo, una región que siempre había destacado por el alto porcentaje de negativas familiares las redujo hasta mejorar la media nacional, un 14,4% frente al 15,6% de la media española.

    Gráfico de la Organización Nacional de Trasplantes (ONT)

    Desde el año 1965, cuando el Hospital Clínico de Barcelona llevó a cabo el primer trasplante renal en España, el panorama ha cambiado de forma radical. El doctor Matesanz, fundador de la ONT en 1989, ha recordado cómo esta organización nació para salvar la crisis en la donación que experimentó España a mediados de los ochenta. Desde entonces, profesionales sanitarios y medios de comunicación han trabajado de la mano en lo que ha supuesto una auténtica revolución cultural, pasando de 1.244 trasplantes en 1989 a 4.821 en 2016.

    En la actualidad, más de la mitad de los enfermos renales que necesitaba diálisis está trasplantado, porcentaje que supera el 75% en la franja de edad entre los 15 y los 44 años.

    Matesanz ha hecho hincapié en la importancia de que España mantenga el principio de cohesión en materia de donación y trasplantes, es decir, que funcione como un todo en la libre circulación de órganos y pacientes. En base a este principio, Castilla-La Mancha envió el año pasado 79 órganos y recibió 4.

    El presidente de la ONT ha pedido al Gobierno que legisle en dos sentidos, para evitar el turismo sanitario relacionado con los trasplantes y para proteger a los donantes vivos, ya que “más de la mitad se enfrenta a problemas laborales serios y un 8% pierde el trabajo”. Y es que, para una persona sana, donar un riñón implica pruebas, exámenes físicos y psicológicos, una intervención y una posterior recuperación. Aquí la ONT pide que la portección sea similar a la de la baja por maternidad.

    Matesanz aún no sabe a quién dejará el testigo, pero este médico se jubila después de situar a España como líder mundial en donación de órganos, un sistema altruista que, a su juicio y sin dejar lugar a la duda, debe permanecer así.

    Inauguración en Zaragoza de la Reunión Nacional de Coordinadores de Trasplantes y Profesionales de la Comunicación.