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Tomelloso, Toledo y Albacete, hospitales viejos y nuevos dan sobresaltos, ya sea por tormentas, por ejecuciones rápidas, por roturas de cañerías o, simplemente, porque hay infraestructuras que están obsoletas. En cualquier caso, esta noche le ha tocado al Hospital General Universitario de Albacete, con la inundación de las habitaciones donde descansan los médicos de guardia. Un día después de la polémica visita política a las obras del centro, el hospital ha dado un síntoma más de que necesita una intervención urgente más allá de la pasarela o el aparcamiento.
El Plan Director del Complejo Hospitalario Universitario de Albacete, que se está gestando desde hace una década, contempla una ampliación de 35.618 metros cuadrados de obra nueva y 22.463 metros cuadrados de reforma en el edificio actual. Es decir, un total de 58.081 metros cuadrados de actuación en superficie hospitalaria, según el proyecto arquitectónico.
Esto supone casi duplicar la superficie en metros del actual Hospital General Universitario y actuar en más del 75 por ciento de la superficie ya construida.
El proyecto, según se recordó en la visita institucional a las obras del pasado día 9 de junio, contempla conservar el edificio matriz del Hospital General, reformándolo íntegramente y en su totalidad. Si la ampliación se llevara a cabo, se mantendrán las actuales habitaciones pero totalmente renovadas y mejoradas. Se construirá un nuevo hospital compuesto de nuevos módulos y edificios ubicados en la parcela liberada tras las demoliciones correspondientes, integrados e interconectados con el edificio principal actual.
