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El rescate de cadáveres en accidentes de tráfico; poner en riesgo su vida en incendios o ver víctimas de corta edad por las que poco o nada pueden hacer. El 9% de los bomberos se arriesga a un estrés laboral crónico y el 6% sufre estrés postraumático. Este cuerpo, junto con Protección Civil o los profesionales centrados en rescates, debe cuidar su salud mental.
“El trabajo de bomberos: Exposición a eventos adversos, estilos de afrontamiento y burnout”, de la investigadora Nadia Ramos Alvarado, desvela que existe un nueve por ciento de personas de dicho ámbito laboral que se encuentran en riego de desarrollar este tipo de estrés laboral crónico.
Por otra parte, se encontró una prevalencia de un seis por ciento de estrés postraumático en estos profesionales, cifra similar a la observada en estudios internacionales, tal y como se recoge. “Si bien ambas dificultades de salud mental se pueden producir a propósito de las acciones propias del trabajo que realizan los bomberos, tienen factores de riesgo diferentes. En el caso del burnout, son relevantes los efectos de la satisfacción laboral, el clima organizacional y la disociación peritraumáticas; mientras que en el trastorno de estrés postraumático es más importante el número y el impacto de los eventos a los que se han expuesto, además de la disociación peritraumática”, añade la investigadora.
Estos resultados son relevantes ya que aportan información para la elaboración de planes de prevención y orientaciones para las acciones formativas, de cara a dotar al cuerpo de bomberos con herramientas psicosociales para una actuación más eficiente y para su protección laboral.
Para este estudio se ha contado con la colaboración de los Servicios Especiales y de Prevención y Extinción de Incendios de Albacete (SEPEI), y el Servicio contra Incendios y Salvamentos del Ayuntamiento de Albacete.
El peligro, inherente al bombero, pone en juego su salud mental
En esta investigación se pone de manifiesto que personas que trabajan en contextos de emergencia, como rescatistas, bomberos, protección civil y otros profesionales relacionados con la emergencia, son más susceptibles de desarrollar estrés y problemas de salud mental a propósito de su actividad. El trabajo de los bomberos se caracteriza por la exposición a diversas fuentes de estrés como altas exigencias físicas, condiciones ambientales peligrosas, riesgo de la vida propia y la de otros, tener que tratar con el público en situaciones extraordinarias, y tiempo de respuesta inmediato. “Debido a estos elementos, se considera relevante conocer los eventos a los que se exponen los bomberos y cómo estos les afectan, pues se trata de un colectivo que presta servicios de apoyo a la población pero que ha sido escasamente considerado como grupo de riesgo”.
El salón de actos del edificio Melchor de Macanaz ha acogido la celebración del seminario: “El trabajo de bomberos: Exposición a eventos adversos, estilos de afrontamiento y burnout”, como parte de la investigación realizada en la Universidad de Castilla-La Mancha (UCLM) por la investigadora visitante Nadia Ramos Alvarado, psicóloga experta en el estudio del estrés post traumático de la Universidad de Talca (Chile). El seminario, organizado por la Facultad de Relaciones Laborales y Recursos Humanos de Albacete, revela en este estudio que “si bien la prevalencia de burnout (estado de agotamiento físico, emocional o mental) es baja con un uno por ciento de incidencia, existe un nueve por ciento de estos profesionales que se encuentran en riego de desarrollar este tipo de estrés laboral crónico.
El seminario ha contado en el acto de apertura con la directora académica de Transferencia e Innovación, Rosario Pérez; el teniente alcalde del Ayuntamiento de Albacete, Alberto Reina; el diputado del Sepei de la Diputación Provincial de Albacete, Juan Gil, y el vicedecano de la Facultad de Relaciones Laborales y Recursos Humanos de Albacete, Pablo Olivos.
