De entre todas las afecciones de la piel que pueden causarnos una gran incomodidad, la dermatitis atópica es una de las principales. Siendo una de las causantes de diferentes síntomas de inseguridad e incomodidad que pueden llegar a afectar de manera directa a nuestra calidad de vida. Se trata de una enfermedad crónica de la piel que afecta a una gran cantidad de personas en todo el mundo. Siendo un problema creciente para multitud de personas.
De entre los diferentes elementos que provoca esta enfermedad, nos encontramos con el enrojecimiento, la inflamación y el picor intenso en la piel. Más aún si nos centramos en determinadas zonas de nuestro cuerpo, como es el caso de la cara, el cuello, las manos y los pies. En este artículo, profundizaremos en qué es la dermatitis atópica, qué factores pueden influir en su aparición y cuáles son las soluciones para su tratamiento.
¿Qué es la dermatitis atópica?
Como ya hemos mencionado previamente, la dermatitis atópica es una enfermedad que se caracterizan por su capacidad para inflamar la piel con un enrojecimiento, picor y sequedad que actúan como los actores protagonistas.
El cuadro sintomático de la dermatitis atópica es muy variado. En algunos casos, la mayoría de ellos, la piel puede ser extremadamente seca y escamosa, mientras que en otros casos, la piel puede tener ampollas y llagas. Sin embargo, en este caso, no es la situación más habitual. Dado que una vez las personas observan cierta sequedad, es cuando acuden a la farmacia en busca de productos como crema protectora Sudocrem Multi Expert, por ejemplo.
Estos son los factores que influyen en su aparición
Son muchos los factores de riesgo que pueden influir de manera directa en la aparición de las dermatitis atópica. Entre todos ellos, destacan considerablemente los siguientes:
- Antecedentes familiares: Está comprobado que la dermatitis atópica se hereda. Por tanto, hay que tener una especial atención con esta situación.
- Alteraciones del sistema inmunológico: La dermatitis atópica se considera una enfermedad autoinmunitaria, lo que significa que el sistema inmunológico del cuerpo ataca a sus propias células. Esto puede llevar a una respuesta inflamatoria en la piel.
- Factores ambientales: Los alérgenos ambientales, como el polvo, el polen y el pelo de los animales pueden llegar a influir de manera considerable.
El tratamiento de la dermatitis atópica
En contra de la creencia general, conviene saber que no hay cura para la dermatitis atópica. Pese a ello, hay varias soluciones para poder mejorar la incidencia de la enfermedad:
- Hidratación: La hidratación regular de la piel es fundamental para mantener la piel limpia.
- Medicamentos tópicos: Los medicamentos tópicos son cremas, pomadas o ungüentos que se aplican directamente sobre la piel afectada. Una buena opción es la crema que hemos mencionado en el inicio del presente artículo.
- Fototerapia: Algunos tratamientos de fototerapia nos permiten exponer la piel a la luz ultravioleta bajo supervisión médica. Esto puede ayudar a reducir la inflamación y el picor en la piel. Mejorando considerablemente la salud de nuestra piel.