Castilla-La Mancha ha cerrado los primeros ocho meses del año con un récord histórico de donaciones de órganos. En este periodo se han registrado un total de 65, cifra nunca alcanzada para ese periodo de tiempo. De mantenerse esta evolución, podría llegar a superarse el récord de donaciones registradas en un año. Por ahora el dato más elevado se dio en 2019, con 85 donaciones.
Los números hasta agosto los acaba de facilitar el consejero de Sanidad, Jesús Fernández Sanz. Ha indicado que Albacete y Toledo siguen siendo las provincias con más intervenciones por donación de órganos en el Servicio de Salud de Castilla-La Mancha.
Por otro lado, destacar que, según lo acaba de dar a conocer la Organización Nacional de Trasplantes (ONT), uno de cada cuatro donantes de la Unión Europea proviene de España. Nuestro país mantiene así la segunda posición mundial en donación de órganos, solo por detrás de Estados Unidos.
El Grupo de Trabajo Donación y Trasplantes de la Sociedad Española de Medicina de Urgencias y Emergencias (SEMES) ha remarcado que es importante recordar que la mayoría de esos donantes habían sido atendidos en un primer momento por profesionales de urgencias y emergencias. De hecho, el ya clásico proyecto ACCORD- España demuestra que 1 de cada 4 donantes se detecta fuera de la UCI, en especial en los Servicios de Urgencias.
El Grupo ha presentado recientemente el documento «Procedimiento de traslado extrahospitalario de paciente que solicita la donación de órganos tras la prestación de ayuda para morir».
Su objetivo es establecer unas recomendaciones para el desarrollo armonizado de la donación de órganos tras la PAM (Prestación de Ayuda para Morir). Protocolo que articule la relación entre los distintos profesionales intervinientes en el procedimiento.
Donación en asistolia
En palabras de los coordinadores del Grupo, los doctores Miguel Agudo y Alonso Mateos, en algunas ocasiones los pacientes que quieren ejercer su derecho a la PAM solicitan la posibilidad de donar órganos y tejidos tras el fallecimiento, como un acto dentro de su plan de final de vida. «El sistema sanitario tiene la obligación de asegurar esta opción a aquellos pacientes que lo soliciten», han indicado.
Alonso Mateos ha añadido que la donación en asistolia se está expandiendo por todo el mundo.
Ha añadido que, aunque en un primer momento la detección de donantes en los Servicios de Urgencias Hospitalarios iba encaminada a los cuidados intensivos a la donación tras la muerte encefálica, se ha visto que muchos de estos pacientes son sometidos a adecuación de soporte vital debido a las condiciones médicas a las que derivan y, posteriormente, se produce la donación en asistolia controlada. «Al igual que en otros procesos, muchos de estos pacientes han accedido al sistema sanitario a través de los servicios de urgencias», ha remarcado.
Han detectado escapes
Por otro lado, los expertos han reconocido que a pesar de todo se han detectado un 0,8% de escapes. Es decir, de posibles donantes que no han sido comunicados a la coordinación de trasplantes correspondiente. «Todo donante cuenta. Es importante que todos los profesionales de los servicios de urgencias hospitalarias y emergencias extrahospitalarias estén sensibilizados con su detección».
Así, el Grupo de Trabajo de SEMES Donación y Trasplantes realizó una encuesta entre todos los profesionales de urgencias y emergencias para conocer el grado de formación que tenían estos en materia de donación y trasplantes. Y casi la mitad de los participantes manifestaron no sentirse realmente preparados para la detección de posibles donantes (47%). Por otro lado, la inmensa mayoría (98%) pensaba que era labor de los profesionales de urgencias y emergencias.