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Las competencias en materia sanitarias están transferidas a las comunidades autónomas, pero ello no impide que medidas de esta cartera se hayan colado también entre las principales propuestas de los partidos para el 23-J. Hay quienes planteaban que se regulen por ley, como el PSOE y Sumar, mientras que el PP apuesta por mayor inversión desde el Estado para Atención Primaria. Vox aboga porque el Estado recupere las competencias sanitarias. Con el PP como partido más votado pero sin una mayoría clara y con todo abierto ante los pactos tras las votaciones, recordamos los compromisos de cada partido en materia sanitaria.
La gestión de los hospitales y centros de salud corresponde a cada comunidad autónoma pero los líderes políticos nacionales no han obviado sus propuestas sanitarias en la carrera hacia el 23-J.
Así, el partido en el Gobierno, que preside Pedro Sánchez, que podría formar gobierno con Sumar y otros partidos más minoritarios, propone limitar por ley las listas de espera. Los plazos que da son un máximo de 120 días de espera para intervenciones quirúrgicas, 60 para consultas externas especializadas y 30 días para pruebas complementarias. También propone un tiempo máximo de 15 días para atención a salud mental a menores de 21 años.
El PP se fija en la Atención Primaria
En el programa del presidente del PP el candidato más votado el 23-J, Alberto Núñez Feijóo, tenía como una de las principales promesas sanitarias es un Plan de Choque para mejorar la Atención Primaria, a la que la pandemia del Covid le ha pasado demasiada factura.
De este modo, proponen la contratación de 1.000 plazas adicionales de medicina familiar y comunitaria a la oferta de Empleo del año 2024. También plantean incentivos para quienes apuesten por medicina familiar, con el fin de hacer más atractiva una especialidad que necesita más profesionales.
Crear el título de especializa en urgencias o aumentar las plazas universitarias en Enfermería forman parte también del programa de los populares en esta área.
Las listas de espera
Por otro lado, la formación de Santiago Abascal, Vox, el partido que ha bajado notablemente en escaños, plantea la “devolución inmediata” al Estado de las competencias autonómicas de sanidad. Y mientras ello llegara plantean crear una tarjeta sanitaria única en toda España, la unificación de la historia clínica y farmacéutica digital, así como una cartera de servicios común.
También recogen que la Sanidad española debe dar “preferencia sanitaria a todo español y residente legal y a los trabajadores españoles que regresen del extranjero, aunque sea temporalmente”.
En su programa aseguran que: “Reduciremos el volumen y tiempo de las listas de espera en todos los ámbitos” o que “reforzaremos la Estrategia Nacional del Cáncer fomentando la investigación y el diagnóstico precoz, promoveremos la investigación médica y reforzaremos la Estrategia Nacional de Salud Mental, reforzando la prevención”.
Sumar promete incorporar nuevas prestaciones
Por otro lado, Sumar, el partido de Yolanda Díaz llevaba entre sus promesas electorales la de incorporar a los servicios sanitarios públicos nuevas prestaciones; como la salud bucodental, la nutrición, la salud óptica, la audioprótesis, la psicoterapia o la terapia ocupacional. También reforzar presencia de especialidades en el sistema público como la fisioterapia.
Entre otras propuestas, Sumar plantea acabar con las guardias médicas de matronas y enfermeras de 24 horas y pone sobre la mesa el compromiso de trabajar para avanzar desde el sistema de guardias a un sistema de turnos, como ocurre en otros países europeos.
Como el PSOE, prometía una ley que fije los tiempos máximos de espera en la Sanidad. Y plantea que el gasto sanitario público aumente anualmente.
