• El diablo en los detalles

    El Autor

    Juan Ignacio Pérez Calvo

    Médico y Profesor de Universidad de Zaragoza

    “La rebelión de las masas”, escrita hace un siglo, comienza de un modo sorprendente. A partir de un detalle aparentemente nimio, Ortega diseca el perfil de un nuevo tipo social, el “hombre masa”. La lectura del libro es sencilla y su enseñanza profunda. Si de esta lectura aprendí algo, fueron dos cosas. El enorme valor de los pequeños detalles, aparentemente triviales. Y, la tozudez del español en sus errores. Pues, si el hombre masa de principios del siglo XX era poco más que una fina disección intelectual, el de principios del XXI es una contumaz realidad. Quien no me crea, tiene otra razón más para leer a Ortega.

    En la convulsa política nacional, representada en el dramático escenario de la pandemia, han ocurrido tres sucesos cuya importancia radica en el detalle. En el insignificante detalle. Ya saben “el diablo está en los detalles”.

    El primero y más importante. El Parlamento decreta el estado de alarma, nada menos que, por seis meses. Una decisión difícil, sin duda. El responsable de defenderla en la cámara de la soberanía del pueblo, donde dicen que todos estamos representados, es el ministro de Sanidad. Me pregunto ¿no debería haber sido el presidente? Es una decisión que limita derechos fundamentales de toda la ciudadanía, la ocasión lo hubiera merecido. Pero, aun siendo llamativo, no es este el detalle mordaz. Esto podría ser una decisión arriesgada, pero, de algún modo, fundada. En lo que quiero centrar su atención es en el detalle. Inmediatamente tras la intervención del ministro, el presidente se va ¿Qué traduce ese gesto? ¿Qué opinión tiene el presidente de sí mismo? No es poco, ustedes mismos.

    El segundo, de menos trascendencia, pero muy lacerante a mi juicio. La fiesta de aniversario de “El Español”. Un momento inoportuno, una puesta en escena ostentosa, un elenco de personalidades trufado de vanidades, el pueblo representado (es ironía), solo Podemos y Vox faltaron. Un coste desorbitado. Si la información en las redes es cierta, nada menos que 42.500 euros en tiempos de hambre y angustias en millares de hogares. Pero, el detalle, demoledor, es otro.

    El ministro de Sanidad, pillado in fraganti, se excusa: “había menos gente que lo publicado” (por eso rápidamente retiraron las fotos de Internet y, desde luego, eran más de seis), “se cumplían las normas de distanciamiento” (sí, vean las fotos) y… acudió para respaldar a la Ministro de Defensa que iba a ser homenajeada, y de paso, por el mismo precio, puesta en evidencia. Sr. Illa, acepte que metió la pata, pida disculpas y considere si es mérito suficiente para hacer las maletas.

    El detalle

    El tercero, cómico e insignificante, si no fuera por lo dramático del momento. D. Fernando Simón se excusa tras una de sus comparecencias, “tengo un compromiso importante”. Una videoconferencia con dos deportistas que publicarán en su Facebook. El detalle, de nuevo demoledor. Un compromiso importante… ¿para quién? Para los miles de españoles que vivimos angustiados por la pandemia, no. Para los miles de comerciantes, hosteleros, sanitarios, no. Era importante para él ¿Por qué? ¿Qué revela eso sobre su personalidad? Quizás ya es hora de que algún buen amigo tenga un poco de misericordia y le pida que se tome un descanso, un retiro. Quizás sea hora de que haga las maletas también. Saquen sus propias conclusiones.

    Narcisismo y enfrentamiento

    En la vida política española sobran narcisismo y enfrentamiento a partes iguales. Mientras la sociedad hace colas de hambre cada día más largas y está huérfana de información solvente, de la mínima certidumbre con la que construirse el futuro más inmediato, la casta política, toda ella, viven una vida virtual, en un recinto ferial, desde el que ni ven ni huelen lo que estamos pasando fuera.

    No despierten al hombre masa, no está muerto, solo aturdido

    No jueguen más, pónganse como Templarios codo con codo (“Deus le vol”), aprieten los dientes, si el tufo de su vecino no es de su agrado, aprieten la mascarilla, pero hagan algo pensando en todos y háganlo ya. No hay más tiempo que perder.

    Olviden la política de partido. No despierten al hombre masa, no está muerto, solo aturdido.

    inaugurado hospital Toledo Reyes
    Inauguración del nuevo hospital de Toledo esta semana. Hoy no tiene pacientes, pero abrió sus puertas para una inauguración mientras Toledo sigue en Nivel 3 y la autonomía está bajo cierre perimetral, restricciones y toque de queda. Las reuniones no pueden exceder de seis personas.

    Un comentario

    1. Estilo puro, claro y preciso. Incisivo.
      Me alegra encontrar un fan de Ortega.
      Pero es todo tan evidente.
      Esta generación no está aturdida.
      está muerta. Perdona el pesimismo.

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