Una sentencia que sonroja al Sescam

Es indignante observar cómo nuestro Sescam y nuestro Gobierno autonómico nos obliga continuamente a acudir a los tribunales en lugar de asumir lo que por justicia y decencia corresponde por derecho a sus propios profesionales.

Desde CSIF se ha logrado la primera sentencia al abono de la atención continuada a un profesional de ámbito sanitario mayor de 55 años que se encontraba en situación de incapacidad temporal.

La Ley 4/2011, del Empleo Público de Castilla-La Mancha, en su disposición adicional séptima y las sucesivas resoluciones dictadas por el Sescam han restringido y vulnerado los derechos de estos profesionales que se encontraban en situación de IT o contingencia profesional (accidente de trabajo y enfermedad profesional), pero gracias a esta sentencia se fija el punto de mira en que las retribuciones de atención continuada son fijas y periódicas, y por tanto se pueden percibir aún estando de baja.

Dicho abono sí se encuentra reconocido en otras comunidades autónomas y otros servicios de salud.

Lo importante es que esta sentencia abre las puertas a multitud de recursos, pero el Sescam ya ha anunciado que va a recurrir esta sentencia. ¿Cómo es posible que en lugar de asumir lo que es justo, nuestro Servicio de Salud prefiera litigar? La respuesta es muy sencilla: quieren dilatar y dilatar para evitar el desembolso económico.

¿Es ésta la defensa que tienen de sus profesionales?

Desgraciadamente, es la práctica habitual del Sescam: recurrir y litigar para evitar pagar y reconocer nuevos derechos o recuperar los bloqueados. A modo de ejemplo, sobre la exención de guardias a mayores de 55 años, en CSIF también lográbamos el pasado mes de diciembre que el Tribunal Superior de Justicia de Castilla-La Mancha avalase esta exención de guardias también para el personal sanitario interino después de que el Sescam denegase este derecho a un trabajador temporal, e incluso hemos  llegado al Tribunal Supremo para conseguir el abono de la atención continuada para las embarazadas en incapacidad temporal después de que el Sescam se negara.