• Villarrobledo sólo deriva el 10% de los tumores de piel

    Aunque algunos casos por su mayor complejidad deben ser derivados al Hospital General de Albacete, gracias a la estrecha colaboración que existe entre los profesionales de los Servicios de Otorrinolaringología y Dermatología, más del 90 por ciento de los pacientes con tumores en áreas visibles como la cabeza y el cuello son intervenidos quirúrgicamente en el Hospital General de Villarrobledo.

    En este centro hospitalario, además de extirpar los tumores, se realizan intervenciones para reconstruir las zonas afectadas y disminuir así las consecuencias funcionales y estéticas del cáncer. De esta manera, tal y como explica el doctor Manuel García, “se evitan derivaciones a otros hospitales más lejanos” y se consigue “que cada caso sea analizado y tratado por especialistas de los dos Servicios”.

    Ese trabajo multidisciplinar permite reducir considerablemente el tiempo de espera desde que el cáncer es diagnosticado por las dermatólogas María Encarnación Gómez y Manuela López, hasta que es operado. “Eliminamos mucha burocracia y tiempo de espera. Eso nos permite combatir el cáncer lo antes posible, mejorando así el pronóstico del enfermo”, ha recalcado el doctor García.

    “Cuando un paciente se opera, reservamos un tiempo específico en las consultas para tratarlo, curarlo y, en definitiva, hacerle un seguimiento exhaustivo”, ha subrayado el otorrinolaringólogo Manuel García.

    Esta forma de trabajar está dando muy buenos resultados. Así se recoge en dos ponencias presentadas por la doctora Inmaculada Moreno en el 68º Congreso Nacional de la SEORL (Sociedad Española de Otorrinolaringología) y en la 36ª Reunión de los Servicios ORL de las comunidades de Valencia, Murcia y Castilla-La Mancha. Entre los dos Servicios, se han realizado más de 1.000 intervenciones de este tipo en el Hospital General de Villarrobledo.

    En este trabajo de recopilación también se destaca que la mayor parte de cirugías practicadas han sido para extirpar tumores en orejas y labios. Otras zonas del cuerpo donde también se han realizado intervenciones de estas características, durante estos diez años, han sido en la nariz, mejilla, frente y cuello, precisamente las zonas más expuestas al sol.