• Si tocas, no bebas

    El alcohol, con los primeros sorbos, desinhibe, lo que consigue que el tamborilero, aunque sea la primera vez que coge los palillos, se crea el amo. Pero, conforme avanzan el día y los tragos, el abuso inhibe el sistema nervioso. Hipoglucemia, acidosis, hipotermia e, incluso, parada cardiorrespiratoria. beber sin control, lo que se ha convertido en una costumbre en las tamboradas, es un peligro para la salud, de ahí que localidades como Hellín hayan iniciado campañas informativas para concienciar a la población.

    “¿Dónde está lo divertido?”. Con esta pregunta, en la que dos tamborileros miran como otro no se sostiene del mareo, el Ayuntamiento de Hellín pide a las miles de personas que tocarán esta Semana Santa que sean comedidas.

    Y es que la noche o el día pueden acabar más allá de la desagradable vomitona. Elías Rovira, profesor de la Facultad de Enfermería de Albacete, ha recordado a Diario Sanitario que el alcohol aún está ligado a la diversión en la memoria colectiva. Sin embargo, nada más alejado de la realidad. Se trata de un inhibidor del sistema nervioso que, si bien con los primeros tragos te hace más sociable, porque afecta al neocortex, a la corteza cerebral más reciente, conforme aumenta la dosis, el alcohol va profundizando. Poco a poco, no mides las palabras, tienes dificultades para hablar, pierdes reflejos y, si no frenas, puedes llegar a la parada cardiorrespiratoria.

    El abuso de alcohol produce hipoglucemia, hipotermia y acidosis, entre un sinfín de síntomas que pueden desencadenar graves consecuencias. Además, ni la vitamina B, ni el café, ni tomar el aire o provocarse el vómito puede mitigar los síntomas una vez que has sobrepasado los límites. Rovira ha recordado que metabolizar el alcohol lleva un tiempo, éste tiene que pasar por el hígado, de ahí, que superado el límite, cueste tanto recuperarse.

    En cualquiera de los casos, el primer consejo pasa por renunciar al alcohol o, en su defecto, beber con moderación. Si se observa que alguien ha perdido el conocimiento, se debe pedir ayuda o trasladarlo a Urgencias y, en cuanto se observen síntomas de mareo o pérdida de control, se debe parar inmediatamente de beber. También se aconseja no ingerir alcohol con el estómago vacío.