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El proyecto “Biblioteca abierta: Libros de ida y vuelta” acaba de nacer para humanizar el tiempo de espera tanto de los pacientes ambulantes como de los hospitalizados, así como de sus familiares.
La biblioteca funciona con nueve usuarios de Asprona a los que apoya un voluntario de Cruz Roja
Esta biblioteca hospitalaria acaba de arrancar en el Hospital de Almansa, en los centros de salud y en los consultorios locales gracias a la colaboración de voluntarios y profesionales de Cruz Roja, del Centro Ocupacional “José Tomas”, de Asprona, y del Ayuntamiento de Almansa a través de la Biblioteca Municipal.
En total, nueve usuarios de Asprona son los encargados de llevar a cabo el proyecto, con apoyo inicial de un voluntario de Cruz Roja y un técnico de Asprona.
El proyecto se desarrolla en todos los puntos de la Gerencia, de hecho los libros y revistas están al alcance de los pacientes y acompañantes en la sala de espera de: paritorio, pacientes críticos, tratamientos de Hospital de Día, o área de procedimientos especiales, entre otros.
El proyecto admite donaciones de libros
Tanto en el Hospital como en los centros de salud y consultorios de la Gerencia, se podrán dejar los libros ya leídos, cambiarlos por otros nuevos, incluso realizar donaciones de nuevos ejemplares.
El fondo actual de libros y revistas, tal y como han indicado los responsables del proyecto, procede del fondo documental de la Red de Bibliotecas de Castilla-La Mancha y de las donaciones realizadas a la Gerencia por parte de profesionales del Área.
Así lo ha puesto de manifiesto hoy el gerente del Área de Atención Integrada de Almansa, Antonio Sánchez, durante la presentación del proyecto que hoy se ha realizado en el Hospital General de Almansa, coincidiendo con el Día del Libro, un acto al que ha asistido la directora provincial de Sanidad, Blanca Hernández.
Se pretende fomentar la lectura para hacer de las salas de espera unas “salas de estar”
El gerente ha destacado que este proyecto se enmarca dentro del Plan de Humanización de la propia Gerencia, una iniciativa con la que se pretende fomentar la lectura para hacer de las salas de espera unas “salas de estar” al tiempo que se promociona la accesibilidad y las oportunidades de inclusión de personas con discapacidad intelectual a través de su participación.
Una misión de Asprona
Entre las tareas que llevan a cabo las personas que participan en el proyecto, tal y como ha explicado la técnico de Asprona, Belén Soriano, está la reposición de libros y revistas en los espacios destinados para ello, y son los encargados de colocar una pegatina a los libros donados, de forma que se conozca cómo funciona la iniciativa. También son los encargados de clasificar y ordenar los ejemplares donados al proyecto en la biblioteca del centro hospitalario.
