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Si en el peor año de la pandemia del COVID, los muertos por esta patología suponían uno de cada cuatro fallecidos en la región, su incidencia ya es mucho menor. En 2022, y según los datos definitivos que acaba de publicar el Instituto Nacional de Estadística (INE), el 7% de los fallecidos en Castilla-La Mancha lo fue por coronavirus. En total, el año pasado murieron en la región 20.541 personas y fueron 1.443 los muertos por COVID.
Lo que no cambia sobre la etapa prepandemia es que las enfermedades del sistema circulatorio y los tumores siguen siendo las principales causas de muerte en Castilla-La Mancha. Así, hasta el 25,8% de los muertos el año pasado en la región padecían una enfermedad del sistema circulatorio. En total, fueron 5.318 los muertos en nuestra comunidad autónoma por esta causa.
Casi el 25% de las muertes se debió también a los tumores, con 4.803 fallecidos por cáncer. El Tumor maligno de la tráquea, de los bronquios y del pulmón, con 881 muertos el año pasado en la región, volvió a ser el de mayor incidencia.
En cuanto a las muertes por problemas del sistema circulatorio, el INE detalla que 974 personas murieron por una insuficiencia cardíaca, mientras que 640 fallecieron por un infarto de miocardio agudo y 555 más por otras enfermedades isquémicas del corazón.
Problemas respiratorios
Hasta 2.131 castellano-manchegos fallecieron por enfermedades del sistema respiratorio. Cabe apuntar que las muertes atribuidas al COVID no computan aquí, al contar con su propio epígrafe.
Por asma fallecieron 35 personas en la región y por gripe 46, mientras que por enfermedades crónicas de las vías respiratorias inferiores (excepto asma) perdieron la vida 561 y la neumonía estuvo detrás de 532 muertes en toda la región.
Por otro lado, hubo 1.118 fallecidos por enfermedades cerebrovasculares, durante 2022, en toda Castilla-La Mancha y según los datos del INE.
Caídas accidentales y homicidios
El informe del INE también pone de relieve que hasta 236 castellano-manchegos perdieron la vida por una caída accidental, mientras que se contabilizaron hasta 18 muertes por agresiones u homicidios. Otras 161 personas fallecieron por ahogamiento o en sucesos como incendios de manera accidental. Y seis más se envenenaron por accidente.
El informe contabiliza, por otro lado, seis muertes como consecuencia de una complicación en la atención médica y quirúrgica.
Una tendencia similar hasta junio
El informe del INE también recoge los datos provisionales de causa de la muerte entre enero y junio de este año 2023. Así, en el primer semestre de este año sigue a la baja la incidencia del COVID en cuanto a mortalidad, mientras que las enfermedades del sistema circulatorio siguen siendo las que provocan un mayor número de fallecidos en la región.
En total, entre enero y junio han fallecido en Castilla-La Mancha 9.992 personas y, de ellas, solamente 242 muertes se atribuyen al COVID.
Hasta 2.663 de esos fallecimientos se han debido a problemas del sistema circulatorio, con 325 muertos por infarto de miocardio. Las muertes por tumor, en los seis primeros meses del año en la región, suponen 2.449. Hasta 496 de ellas por un cáncer de pulmón o bronquios. Y detrás de 1.306 fallecimientos están los problemas del sistema respiratorio.
Además, en los seis primeros meses del año, 128 castellano-manchegos han muerto por caídas accidentales y hasta cinco como consecuencia de una agresión, por homicidio.
