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España reanudará el miércoles, 24 de marzo, la vacunación COVID con AstraZeneca, después de que la Agencia Europea del Medicamento (EMA) haya confirmado que los beneficios son mayores que los riesgos. Así lo ha confirmado la ministra de Sanidad, Carolina Darias, quien ha matizado que la decisión se ha tomado en el Consejo Interterritorial por “unanimidad”, ya que se trata del “horizonte de esperanza” para acorralar al virus.
Castilla-La Mancha había administrado 14.000 dosis y tiene 59.300 almacenadas
Castilla-La Mancha había administrado 14.000 dosis y tenía 59.300 dosis de AstraZeneca almacenadas cuando se suspendió su administración. Por tanto, el miércoles 24 de marzo reanudará una vacunación que ya había empezado en Guardia Civil, Policía Nacional, Bomberos o agentes de la Policía Local con menos de 55 años. Asimismo, estaba previsto que esta vacuna se empezara a administrar a los docentes esta misma semana, pero la suspensión cautelar truncó la programación.
En este contexto, aunque el porcentaje de efectos adversos es ínfimo, las llamadas de atención de las últimas semanas permitirán que personal sanitario y vacunados estén vigilantes ante dolores de cabeza inusuales en los 14 días posteriores a la vacunación. Así, si bien la EMA no ve relación directa entre la vacuna de AstraZeneca y la formación de coágulos sí quiere investigar casos en los que ha coincidido en personas jóvenes un descenso de plaquetas junto con la formación de trombos.
De momento, habrá una modificación del prospecto, que añadirá efectos adversos antes no descritos. La EMA concluye que la vacuna COVID-19 AstraZeneca “no está asociada con un mayor riesgo general de trastornos de la coagulación sanguínea”. No obstante, sí reconoce que ha habido casos muy raros de coágulos de sangre inusuales acompañados de niveles bajos de plaquetas después de la vacunación. Casi todos los casos notificados correspondieron a mujeres menores de 55 años.
¿Qué dolor de cabeza debe preocupar?
El documento sobre la Estrategia de Vacunación en España advierte que en el caso de AstraZeneca se puede recurrir a una dosis de 1 gramo de paracetamol previa a la vacunación, seguida de 1 gramo cada 6 horas durante las primeras 24 horas, «lo que reduce el dolor local, la febrícula, los escalofríos, las mialgias, la cefalea y el malestar postvacunal, sin influir en la respuesta inmune».
Así, si bien el dolor de cabeza está descrito después de la vacunación con AstraZeneca desde el principio, el que provoca la trombosis de senos cerebrales es tan fuerte que no cede con analgésicos, empeora al tumbarse y puede provocar incluso vómitos.
