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Los casos de infecciones de transmisión sexual se han disparado en las últimas dos décadas en todo el país y Castilla-La Mancha no es ajena a este problema sanitario. La gonorrea se ha multiplicado casi por 25 y la sífilis por 10, mientras la clamidia ha subido un 245%. En nuestra región, si en 2016 hubo siete casos de clamidia, en 2021 eran ya 89, pero en 2022 subieron hasta los 146.
El último informe de Vigilancia Epidemiológica de las infecciones de transmisión sexual en España, publicado recientemente, pone de manifiesto este incremento exponencial de casos que se da en todo el país y también en la región.
En Castilla-La Mancha, por ejemplo, los casos de gonorrea casi se doblaron en 2022 sobre 2021. Si en 2016 -el primer año del que recoge datos este informe- eran 52 casos, en 2021 llegaron a 116 y en 2022 escalaron hasta los 212. Cabe apuntar que el informe se ha publicado ahora, en 2024, pero los últimos datos que recoge corresponden al ejercicio 2022.
La tasa de infección por gonorrea ha pasado en la región de un dos por ciento por cada 100.000 habitantes, en 2016, a más del 10% en 2022.
En el caso de infección por clamidia, los casos en 2016 eran casi testimoniales, con sólo siete en toda la región y una tasa de0,34%. Sin embargo, en 2021 fueron ya 89 y en 2022 crecieron hasta los 146, con una tasa del 7,12%.
Más casos de sífilis
Aunque en menor medida, los casos de transmisión sexual por sífilis también aumentan. En 2016 se detectaron 65; en 2021 fueron 89 y un año más tarde 94. La tasa aumentado en poco más de un punto, del 3,18% de hace siete años al 4,57% de hace dos ejercicios.
El informe recoge los datos relacionados con la infección gonocócica -la gonorrea-, la sífilis, la sífilis congénita, la clamidia y el linfogranuloma venéreo (LGV), de estas dos últimas se hace seguimiento desde 2015, con lo que no hay información de toda la serie como en las otras, que se vigilan desde 1995.
En Castilla-La Mancha, se dieron en 2022 hasta 9 casos de LGV, si bien en 2021 habían sido 2 y desde 2016 se había registrado un único caso en 2018.
Qué son estas enfermedades
Las infecciones de transmisión sexual (ITS), son un conjunto de patologías de origen infeccioso en las que la principal vía de adquisición son las relaciones sexuales, aunque puedan tener otros modos de transmisión. Están causadas por diferentes microorganismos, como virus, bacterias, protozoos o ecotoparásitos.
Se conocen más de 20 infecciones de transmisión sexual y algunas de las más conocidas son la sífilis, la clamidiasis, la gonorrea, el VIH/sida, el virus del papiloma humano (VPH), el virus del herpes genital, la tricomoniasis, la pediculosis pública (ladillas) o la sarna.
Pueden suponer peligro
La importancia de las ITS también radica en sus complicaciones y secuelas si no se realiza un diagnóstico precoz y un tratamiento adecuado. Entre sus complicaciones, puede producirse infertilidad y patologías como enfermedad inflamatoria pélvica, orquitis, epididimitis y cáncer en el caso del virus del papiloma humano (VPH).
Además, muchas de estas infecciones favorecen la adquisición de una de las ITS más conocidas, la infección por el VIH, para la cual existe tratamiento pero no curación. La gran mayoría sí cuentan con tratamientos eficaces, algunas disponen de vacunas y en todas ellas es fundamental tanto la prevención como el diagnóstico precoz.
