• Aumento de la presión asistencial en Psiquiatría

    Que un paciente llegue al psicólogo o al psiquiatra no es fácil. Con motivo del Día Mundial de la Salud Mental, el próximo 10 de octubre, la Asociación Castellano Manchega de Neuropsiquiatría y Salud Mental advierte en su manifiesto del aumento de la presión asistencial. Así, según las últimas cifras oficiales del Sescam, las consultas de Psiquiatría se enfrentan a esperas de hasta 45 días en hospitales como el de Villarrobledo, 41 en Alcázar de San Juan, 36 en Ciudad Real, 27 en Guadalajara o un solo día en Talavera de la Reina. Los profesionales, sin embargo, calculan que la espera para que un paciente, derivado desde Atención Primaria, llegue a un psicólogo supera los tres meses.

    • Complejo Hospitalario de Toledo: 18,9 días de espera media para llegar a la consulta de Psiquiatría.
    • Mancha Centro de Alcázar de San Juan: 41,7 días de espera media.
    • Complejo Hospitalario de Albacete: 13.09 días.
    • Complejo Hospitalario de Guadalajara: 27,4 días.
    • Hospital de Hellín: no figura Psiquiatría.
    • Hospital General de Tomelloso: 4 días.
    • Hospital General de Villarrobledo: 45 días.
    • Nuestra Señora del Prado de Talavera: 1 día.
    • Hospital Santa Bárbara de Puertollano: 22,6 días.
    • Virgen de Altagracia de Manzanares: 25 días.
    • Virgen de la luz de Cuenca: no figura Psiquiatría.
    • Hospital General de Almansa: 16 días.
    • Hospital de Valdepeñas: 6 días.
    • Hospital General de Ciudad Real: 36 días de espera para Psiquiatría.
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    El ‘psicólogo de cabecera’, la figura que resolvería parte del problema desde Atención Primaria

    Es complicado llegar tanto al psicólogo como al psiquiatra. Y, sin embargo, la pandemia ha disparado los trastornos mentales. La espera para que un paciente, derivado desde Atención Primaria, llegue a un psicólogo supera los tres meses en Castilla-La Mancha, donde Salud Mental sólo cuenta con 127 de estos especialistas. De hecho, el Colegio de la Psicología ha advertido en numerosas ocasiones de que la figura del ‘psicólogo de cabecera’ reduciría la lista de espera así como evitaría que se cronificaran enfermedades que se podrían tratar en dos sesiones.

    Una vez que se ha llegado al psicólogo, si éste, que no puede medicar, considera que el paciente debe ser tratado por un psiquiatra, la situación se complica.

    Las listas de espera que publica el Sescam no se refieren a Salud Mental sino a Psiquatría. Pero quitando los hospitales de Tomelloso, Valdepeñas o Talavera de la Reina, donde según las cifras del Sescam, la espera es de menos de una semana, en los grandes centros puede superar el mes.

    El abuso de psicofármacos como consecuencia

    Y en este contexto lo que preocupa a los psiquiatras no es tanto la espera como las soluciones que pueden dar cuando el paciente llega a sus consultas. Trabajar con una presión asistencial que califican de enorme “dificulta tener espacios de coordinación y reflexión conjunta con los diferentes profesionales de la red sociosanitaria y educativa. Situación que aboca a una mayor medicalización”.

    Los propios profesionales advierten del abuso de psicofármacos, en vez de tener estrategias terapéuticas, sociales y educativas que pudieran mejorar los conflictos emocionales y favorecieran la inclusión social.

    Mañana puedes ser tú

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