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La Unidad de Arritmias del Hospital General Universitario de Albacete “regula” con éxito cientos de corazones cada año, sin embargo, en los dos últimos meses trabaja con el miedo a que se vaya la luz en el quirófano. Ha sufrido tres apagones en 60 días. Esta situación, sin un generador de emergencia que funcione, obliga a que paciente y equipo quirúrgico tengan que esperar a que regrese la corriente. Y cuando vuelve, también hay que esperar a reprogramar todos los equipos de nuevo.
La Unidad de Arritmias de Albacete ha sufrido tres cortes de luz en quirófano en dos meses
Y en este contexto, con una única resonancia que trabaja sin descanso y un PET-TAC portátil que ha sufrido una avería esta semana, goteras y una lista de espera que no deja de aumentar, las obras de reforma y ampliación se anuncian para el mes de septiembre.
La denuncia, lanzada por Sindicato Médico (CESM), hace referencia a un servicio que implanta cada año 400 dispositivos para tratar las alteraciones de los latidos del corazón. Se trata de marcapasos y desfibriladores, de última generación, que permiten regular el ritmo del corazón y mejorar, de esta forma, la calidad de vida de los pacientes.
La Unidad de Arritmias del Servicio de Cardiología del Complejo Hospitalario Universitario de Albacete también lleva a cabo cada año unas 150 ablaciones de arritmias cardíacas, una técnica que incorporó la Unidad hace diez años y que, desde hace cinco, se realizan en arritmias complejas.
Y es que la mayoría de los jefes de Servicio han firmado una carta en la que advierten que este hospital tiene serios problemas tanto en sus listas de espera como en tecnología e infraestructuras. Averías en los TAC, la resonancia o la Radiología portátil forman parte del día a día.
Jefes de Servicio se plantan ante la “dejadez” en el Hospital
