Castilla-La Mancha se suma a la posición del Ministerio de Educación, Formación Profesional y Deportes de prohibir el uso de los teléfonos móviles en las aulas de Educación Infantil y Primaria y regularlo en las de Secundaria para usos exclusivamente pedagógicos. De hecho, los pediatras insisten en que profesionales de educación y sanidad, así como familias, deberían remar en la misma dirección frente a los riesgos de los teléfonos móviles.
Así lo ha señalado el consejero de Educación, Cultura y Deportes, Amador Pastor, en unas declaraciones realizadas a los medios de comunicación en las Cortes de Castilla-La Mancha, en las que también ha adelantado que “de todo esto se debatirá en una Conferencia Sectorial que se celebrará a lo largo del mes de enero”.
El consejero de Educación igualmente ha comentado que “la posición de nuestra comunidad autónoma es la de tender, en todo momento, la mano al Ministerio en el desarrollo del marco que se derive, así como aportar el trabajo que venimos realizando desde 2014”.
Además, ha avanzado que en la última Mesa de Padres se informó de la intención del Gobierno regional de hacer “una regulación más concreta de ese uso pedagógico de los teléfonos para prevenir las adiciones y fomentar la utilización responsable de estos dispositivos por parte del alumnado”.
Una relación ‘más sana’
“Ahora bien, el sistema educativo no puede hacer solo toda la labor”, ha explicado el consejero. “Tiene que ser un objetivo colectivo a fin de fomentar una relación con estos dispositivos más sana”, ha finalizado.
No hay que olvidar que hay niños que disponen de un móvil antes de los 11 años y el 98% de los menores de 16 años tiene acceso a Internet, de ahí que los pediatras, preocupados por las consecuencias del abuso de las pantallas, recuerden que el mal uso de la tecnología digital afecta a la salud física, mental, sexual y social.