Pacientes ‘de segunda’ en la Sierra albaceteña

Nerpio está a 151 kilómetros de la capital, Yeste a 131 y Villapalacios a 98 kilómetros de Albacete. Son algunos ejemplos de personas de estos pueblos, que tienen que desplazarse a la capital, unas 150 veces al año, para recibir el tratamiento de hemodiálisis.

Una situación que disminuye la esperanza de vida

Esta diálisis le permite a un paciente seguir viviendo con su enfermedad renal, al quitar toxinas y líquidos de su sangre que su riñón no es capaz de eliminar.

Pero este tratamiento solo se puede realizar en la capital, ya que Albacete es de las pocas provincias de España en que solo hay una localidad donde se realiza.

Provincias limítrofes, como Ciudad Real, disponen de 3 localidades diferentes donde se realiza. En Murcia son 7 y en Alicante 8.

Muchas veces el traslado del paciente hasta Albacete no sigue una ruta directa, desplazándose a otras localidades próximas a recoger a pacientes de otras patologías, con desvíos de la ruta principal y desplazamientos a otros centros sanitarios, situación que hace que aumenten los kilómetros y el tiempo de viaje.

En ocasiones estos desvíos son motivo de conflicto entre pacientes, al incrementar la dificultad del viaje, sobre todo, en aquellos que están un día sí y otro, no.

Desde la asociación Alcer Albacete solicitamos se realice la ruta más directa posible, reclamamos las incidencias que se producen, como en algunos casos la falta de aire acondicionado en días de alerta por altas temperaturas.

Un nefrólogo para Hellín

Continuamos reivindicando la contratación de un nefrólogo en el Hospital de Hellín, que acerque la especialidad a muchos pacientes de la zona. Deseamos que se abra un centro de hemodiálisis en Hellín, que dé servicio a la zona zona y a las localidades de la Sierra de Segura. En algún caso concreto, también solicitamos poder recibir diálisis en Caravaca.

Continuar con esta situación es muy descriminatorio para estos pacientes, que por el esfuerzo sobreañadido, disminuyen su esperanza de vida.