Los jóvenes parecen haberlo olvidado, porque empiezan a fumar a los 13 años, pero el tabaco contiene más de 600 sustancias nocivas, 200 de ellas venenosas, como el arsénico.
El neumólogo Raúl Godoy invita a los adolescentes a rebelarse contra el tabaco
«¿Alquitrán?, pero si eso es lo de las carreteras», decía sorprendido un alumno de instituto al neumólogo Raúl Godoy. Y es que el presidente de la Sociedad Castellanomanchega de Neumología no lo ha dudado cuando le han pedido esta semana que dé una charla sobre tabaquismo a alumnos de Secundaria.
En 45 minutos de conferencia, el doctor Godoy no les ha dicho a los alumnos que no fumen, pero sí que tomen una decisión con argumentos, que no se dejen manipular. Les ha incitado a la rebeldía contra una industria millonaria, la del tabaco y, para ello, le ha aconsejado que no empiecen a fumar.
Y es que si bien el primer cigarrillo no le gusta a nadie, el poder adictivo de la nicotina pronto empieza a hacer efecto. Así, lo que marea y sabe mal al principio, se convierte en una esclavitud de por vida que mata a la mitad de los fumadores.
Argumentos para no caer en el tabaquismo
El tabaco provoca 60.000 muertes al año sólo en España y, sin embargo, uno de cada cuatro adolescentes fuma. Como el 80% de los fumadores cae antes de alcanzar la mayoría de edad, el doctor Godoy ha insistido a los alumnos en que la clave está en no dejarse arrastrar por el tabaquismo.
«La nicotina altera el cerebro; nos esclaviza»
«La nicotina altera el cerebro; nos esclaviza», advertía el neumólogo a una clase impactada por las imágenes y los datos. Los alumnos se han quedado sorprendidos por la temperatura que alcanza un cigarrillo, 800 ºC, pero también por el hecho de que beber un bote, del tamaño del pulgar, de nicotina líquida es capaz de matar a un adulto.
Y si nocivo es el cigarrillo tradicional, tampoco ha indultado Godoy al cigarrillo electrónico, al iQos, al sistema Juul o a las cachimbas. Todos ellos son adictivos y capaces de provocar un sinfín de enfermedades.