• El Hospital de Villarrobledo amplía la cirugía ‘sin abrir’

    Los cirujanos aplican la laparoscopia avanzada en las hernias

    El Hospital de Villarrobledo ha ampliado el uso de laparoscopia avanzada con una técnica que trata las hernias de manera que el paciente sufre menos dolor postoperatorio y tiene una recuperación más rápida.

    El Hospital de Villarrobledo ha ampliado el uso de la laparoscopia avanzada con una técnica que trata las hernias.

    La clave: operar sin abrir, con pequeñas incisiones

    Así, según ha informado el Sescam en un comunicado, el Servicio de Cirugía General del Hospital de Villarrobledo ha llevado cabo recientemente la primera intervención de una hernia incisional por vía laparoscópica.

    En esta ocasión, los profesionales han colocado una malla intraperitoneal en el abdomen del paciente para evitar que la eventración siga aumentando. Y es que cuando estas dolencias no se intervienen pueden derivar en serias complicaciones.

    El Hospital de Villarrobledo ha ampliado el uso de la laparoscopia avanzada con una técnica que trata las hernias.
    Imagen de dos de los cirujanos que han hecho posible el avance en laparoscopia experimentado por el Hospital de Villarrobledo.

    Como ha explicado el cirujano Pablo Sarduy, “estudiamos a todos los pacientes, no todos son subsidiarios de esta cirugía”. Cuando se cumplen los requisitos médicos y siempre que es posible, el equipo, compuesto también por Norman Cervantes, Olga Luego, Alexis Ogando y Valmy Goitia, desarrolla este procedimiento avanzado de laparoscopia.

    Desde el Servicio de Cirugía General del Hospital de Villarrobledo se está progresando en el manejo del laparoscopio, una técnica quirúrgica que permite la realización de cirugías complejas mediante tres o cuatro pequeñas incisiones y la ayuda de la videocámara y el instrumental necesario para realizar las diferentes maniobras.

    Toxina botulínica

    Para optimizar esta técnica, recientemente, el equipo ha realizado hasta tres casos de neumoperitoneo preoperatorio y otro con toxina botulínica. Con estas técnicas, en las semanas previas a la intervención se consigue que se relajen los músculos del abdomen y así sea menos compleja la operación.

    Estas novedades se unen a la recuperación de las cirugías de las hernias inguinales, que también se realizan por laparoscopia. Desde hace dos años se ha aplicado esta intervención a 23 pacientes con los beneficios que conlleva. Sarduy ha precisado que “menos dolor, tiempo de recuperación más rápido y, sobre todo, especialmente bueno, en casos que son bilaterales, pues evitas tener que hacer dos heridas a la misma vez; vamos a seguir trabajando en esta línea”.

    Además de realizar estas intervenciones, desde el servicio se trabaja también en otro tipo de cirugías, como colón, vesícula o apendicitis, así como atención de urgencias.

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