El Servicio de Salud de Castilla-La Mancha (Sescam) pretende que el tratamiento del dolor crónico implique a los pacientes en su cuidado, incluyendo ejercicio terapéutico, apoyo psicológico y prescripción médica personalizada.
- En el caso de Castilla La Mancha, el 22% de la población sufre dolor crónico. En relación al sexo, las mujeres presentan una mayor prevalencia de la enfermedad (30,5%) respecto a los hombres (21,3%). Fuente: Barómetro del dolor crónico.
El dolor crónico es la segunda causa de consulta en Atención Primaria
Así lo ha indicado hoy la directora general de Cuidados y Calidad del Sescam, Monserrat Hernández, durante la inauguración de las I Jornadas Regionales de Abordaje del Dolor Crónico que se están celebrando en el Hospital General de Tomelloso y en las que se han dado cita alrededor de 200 profesionales sanitarios.
Unas jornadas que se han presentado como un espacio de debate y aprendizaje donde abordar los últimos avances en el tratamiento y manejo del dolor crónico y en las que se ha destacado el papel de la fisioterapia en la promoción de la salud y la prevención del dolor, así como su desarrollo basado en la evidencia científica y enfoque multidisciplinario.
La directora general de Cuidados y Calidad ha insistido durante su intervención en la importancia de abordar el dolor crónico, por lo que ha agradecido a los asistentes “su dedicación y compromiso” en esa tarea y por “reciclar conocimientos y competencias profesionales para mejorar la atención a los pacientes con dolor crónico”, una condición que, según ha dicho, “afecta significativamente a una parte importante de la población”
No en vano, en España se estima que entre un 15 y 25 por ciento de la población sufre dolor crónico, lo que hace que esta enfermedad represente la segunda causa de consulta en Atención Primaria. La prevalencia del dolor crónico aumenta hasta un 50 por ciento en mayores de 65 años y es más común en las mujeres.
“Se trata de un problema de salud que tiene un efecto devastador en muchos aspectos de la vida”
“Se trata de un problema de salud que tiene un efecto devastador en muchos aspectos de la vida. No sólo disminuye la calidad de vida del paciente, sino que repercute negativamente en su salud física y emocional, además de una dificultad para la vida social y familiar”, ha explicado.
Por último, recordar que los pacientes más complejos se tratan en las Unidades del Dolor, en las que trabajan profesionales implicados en el abordaje del dolor crónico como anestesistas, enfermeros, rehabilitadores, profesionales de Atención Primaria y fisioterapeutas.
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