Consejos para mejorar el sueño

Aliviar la ansiedad nocturna a través de la ropa de cama

Nuestra salud empieza por descansar, por mejorar el sueño. Gracias al sueño el cuerpo puede revitalizarse, reponerse de las agresiones que sufre a lo largo del día, en definitiva, reiniciarse para poder afrontar con fuerza la nueva jornada.

Desgraciadamente, no siempre se puede dormir bien. La falta de sueño puede ser debida a factores físicos, a situaciones vividas que dejan huella en nuestro subconsciente, a momentos de preocupación o temor, etc. Todo ello hace que no seamos capaces de conciliar el sueño, llevando al cuerpo y la mente a un estado de cansancio permanente nada beneficioso.

Por regla general, los adultos necesitamos una media de siete horas de sueño cada noche, en caso de no disponer de ese tiempo para descansar se producen fallos en el organismo como es la dificultad para pensar con claridad, para reaccionar rápidamente o para crear recuerdos.

Todo lo que nos rodea tiene su efecto sobre la calidad de nuestro descanso. Los elementos que nos acompañan en el dormitorio durante la noche son, en parte, responsables de que podamos dejarnos llevar por un sueño reparador. La ropa de cama es el elemento visual más importante del dormitorio y en ella recae la responsabilidad de proporcionarnos un ambiente acogedor, seguro y agradable para poder caer en brazos de Morfeo. ¿Quieres saber cómo mejorar tu descanso y aliviar la ansiedad nocturna a través de la ropa de cama? Continúa leyendo y lo descubrirás.

Uso de toppers, una elección acertada

Un topper es una capa adicional que se coloca sobre el colchón y permite mejorar el descanso. La función principal de este elemento es ofrecer una superficie más suave sobre la que dormir, es aportar un extra de confort y comodidad durante la noche.

Los toppers suelen estar fabricados con materiales de alta calidad como látex, fibra o viscoelástica, por lo que permiten que el cuerpo pueda descansar de una forma mucho más ergonómica. De esta forma, se consiguen aliviar las presiones que pueden aparecer en ciertas partes del cuerpo como las caderas o los hombros, reduciendo las molestias que dificultan disfrutar de un buen descanso.

Además, ponerle un “topper” a nuestra cama es una forma sencilla y económica de prolongar la vida del colchón. El topper retarda la deformación del colchón debida al uso, permitiendo disfrutar del mismo durante mucho más tiempo.

Ropa de cama adaptada a la estación del año

Un punto fundamental a la hora de conseguir el mejor descanso es disfrutar de la temperatura ideal durante la noche. Pasar frío o calor en la cama dificulta el descanso. A la hora de comprar la ropa de cama se deben tener en cuenta las estaciones del año. Las fundas de almohada y las sábanas deben evitar la acumulación de calor y eliminar la desagradable sensación de frío que puede producirse durante el inverno.

También se debe tener en cuenta si somos frioleros o calurosos para ajustar la ropa de cama a nuestra temperatura corporal y conseguir la temperatura óptima mientras se duerme.

La mejor opción son materiales naturales como el lino, el algodón o la microfibra que aportan suavidad y durabilidad. El algodón es el material que garantiza la mejor transpirabilidad de las sábanas. Además, ofrece una gran capacidad de absorción y evaporación de la humedad, por lo que resulta la mejor opción en ropa de cama.

Elegir colores que transmitan tranquilidad

La sábana es uno de los principales protagonistas de la decoración del dormitorio.

Para conseguir el mejor descanso y evitar la ansiedad nocturna se debe evitar cualquier estímulo que pueda distraernos de ese objetivo. Por ello, es mejor prescindir de colores llamativos o estampados en nuestras sábanas.

El color ideal para las sábanas es el blanco que transmite calma y serenidad, ofreciendo un entorno tranquilo y acogedor donde dejarse llevar por el mundo de los sueños.

Además, el blanco es un color que resulta muy fácil de combinar con el resto de colores de otros elementos del dormitorio.

Dormir bien es tener salud, es poder disponer de toda nuestra energía para afrontar los retos de la vida con todas las armas de las que disponemos. Para conseguir un descanso reparador es fundamental disponer de un entorno tranquilo y acogedor, un lugar seguro donde seamos los protagonistas y el resto del mundo quede al margen. Ese ambiente se puede lograr utilizando la ropa de cama adecuada.