
Se despiden, después de meses de ensayos, más de un centenar de voluntarios se suben los días 10, 11, 16 y 17 de febrero al escenario del Teatro de la Paz de Albacete para interpretar el último musical de Los Guachis del Hospital General Universitario de Albacete, el que cuenta cómo el cáncer infantil se convirtió en la excusa para dejarse llevar por la magia.

- Artistas, como Pedri o el Capitán Optimista han sido una constante en las actuaciones.
Recuerdos y novedades, música de cuento, de cine o italiana, diversión y emociones harán vibrar este fin de semana y al próximo al Teatro de la Paz de Albacete por última vez. Y es que Los Guachis se despiden después de una década.
Todo empezó en 2008, el año en el que Oncohematología Pediátrica cumplía una década. Un pediatra, el doctor Lillo, decidió reunir a todos los pacientes de la sexta planta del Hospital General Universitario de Albacete para celebrarlo. Fruto de aquel encuentro, para no romper el vínculo, nacieron Los Guachis.
Aquel grupo dio sus primeros pasos con fiestas en el salón de actos del hospital, reuniendo a pacientes, familiares y personal en torno a actuaciones de artistas externos.
Pero en 2013, Los Guachis decidieron pasar a la acción, convertirse en artistas. Y rodaron un vídeo, con un tema de Efecto Pasillo como banda sonora, que desbordó todas las previsiones. Con más de 100.000 visitas, aquel primer paso supuso un antes y un después.
Un año después, en 2014, Los Guachis se lanzaron a hacer un musical en el que participasen pacientes, familiares, personal y voluntarios. Así nacieron los musicales de Los Guachis, que se despiden en 2024 con su décima actuación.
Un 2024 para el recuerdo
- Imágenes, del voluntario Pablo Puebla, del último musical de Los Guachis.





















Premios
En diez años, Los Guachis se han convertido en todo un fenómeno. Han recibido multitud de reconocimientos locales, regionales y nacionales, así como han llegado a todos los hogares de la mano de Televisión Española.
Bajo la batuta de la maestra Ana Martínez Soto, un sinfín de voluntarios, asociaciones, instituciones y empresas privadas están detrás de un movimiento que ha revolucionado a toda una ciudad.
Los Guachis se despiden, pero no se van, dejan el ejemplo de quienes lo han dado todo y, aunque no pedían nada a cambio, se van con la mochila llena de los mejores recuerdos y amistades.

Hemeroteca
Una maestra ‘guachi’ para dirigir los musicales









